La Guajira: solo fotos y corrupción

La Guajira: solo fotos y corrupción

Las redes sociales son el pan de cada día de la sociedad, el opio moderno, pero no deben justificar ni reemplazar la gestión gubernamental

El Gobierno Departamental, ahora interino, sí ha sido el Gobierno del Cambio.

Para quienes lo dudan, aquí el argumento: desde enero de 2020, hasta lo que va corrido de agosto de 2022, y sin haberse terminado el período, ha sido el gobierno con más fotografías en redes sociales y la mayoría, reseñando firmas de documentos con otros funcionarios.

Quedará para la historia. El período 2020-2023 fue fructífero. Pero, ¿en qué? En fotos.

Son muy conocidas las caras del gobernador encargado, de los secretarios de Gobierno, de Desarrollo, del director de Turismo, de la gerente de la empresa de Aguas, pero lastimosamente, los avances no aparecen.

En Gobierno, la Gobernación de La Guajira ha sido totalmente ajena a los problemas de seguridad y orden público que enfrentan los distintos municipios. No de ahora, de siempre. Para quienes no estén de acuerdo, permítanme contarles que no solo de Consejos de Seguridad y de Comités, vive la acción de la Secretaría de Gobierno. Municipios como Maicao, Fonseca, Riohacha y San Juan del Cesar, son focos de asaltos, asesinatos y accidentes de tránsito permanentes. Y en La Guajira no se avanza en investigación, ni en prevención. ¿En qué se van los recursos de convivencia ciudadana? ¿En qué se van los recursos del FONSET?; ¿qué gestiones se hacen desde la Secretaría para que la empresa privada, el Gobierno Nacional y los actores de seguridad se comprometan con aportarle a la tranquilidad del ciudadano? Pero las fotos de los consejos de seguridad, están.

Ni qué hablar, de lo indiferente que ha sido la Gobernación con las comunidades indígenas. Contrario a lo que sucede con los secretarios de Gobierno que siempre han estado listos para la foto, los o las de Asuntos Indígenas pasan inadvertidos. No están presentes para acompañar a las comunidades en estos momentos tan difíciles como la intromisión de empresas de energías renovables, o para que se cumplan las distintas sentencias de la Corte Constitucional a favor de los indígenas y en contra del Estado o en contra de empresas como Cerrejón. Ahí parece ser, que la estrategia es ignorar la situación y que los “indios” se las arreglen.

La Guajira es el departamento más pobre de Colombia, seguido de Chocó. Si bien el impacto del COVID19 no fue tan fuerte como en otros departamentos del país, sí agudizó la situación económica de mini empresas y hogares en toda La Guajira.

Pero lo que está matando a nuestra gente, es la ineptitud de la Secretaría de Desarrollo Económico. Anuncios, anuncios y anuncios, fotos van, fotos vienen, pero no hay un solo desembolso de recursos de un plan serio y coherente ajustado a la realidad de la población del campo, del comerciante y menos del turismo.

En este último renglón, tenemos que darle el premio a la dirección turismo por su figuración en redes. Pasará a la historia. Pero en la vida real, que no se nos olvide, que si hablamos de turismo, no es por las atractivas fotos del director, es por el esfuerzo de empresarios locales, que aún con las uñas siguen atendiendo a la horda de visitantes que cada temporada escogen La Guajira como destino para descansar.

“Pasando pena”, como dicen nuestras abuelas, los empresarios del sector se las arreglan para atender al visitante en medio de condiciones difíciles de seguridad en la Alta Guajira, (gestión que no aparece en las fotos del director); la escasez de combustible; infraestructura limitada, condiciones organizacionales básicas, porque no ha existido un programa de apoyo al empresario, fomentado por la Gobernación y la empresa privada

Algunos señalarán Turismo Emprende: pero recordemos, es de Hocol y la Cámara de Comercio, está vigente hace años y la Gobernación va a lo de siempre: a la foto y con eso no se incrementa el apoyo al empresario del sector.

Al gobernador encargado hay que abonarle algo: se toma más fotos que el anterior. Y sigue su misma línea: de aquello nada. De gestión, nada, de trabajo concreto, nada.

Y ahora, hasta el Centro Cultural de La Guajira se convirtió en un basurero satélite, producto del abandono y la soledad en la que lo sumió la Gobernación.

Capítulo especial merece la Dirección de Tránsito: ¿hay dirección de tránsito? Esta sectorial ni para la foto.

Cierto o no, parece que la Gobernación de La Guajira estuviera a la deriva. Sectores básicos e intervenidos por el Estado hasta hace poco, van de mal en peor, como el sector de Educación y Agua y Saneamiento Básico.

Para quienes tengan dudas, pregúntense: ¿porqué tanta protesta en la Secretaría de Educación? ¿Porqué tanto bloqueo en el sur de La Guajira de las comunidades reclamando transporte y PAE? ¿Dónde están las acciones de la empresa Esepgua para mitigar la sed de La Guajira?

Es cierto que la juventud tiene muchas ideas, herramientas para innovar. Pero, señor Gobernador, hay que innovar en la realidad. Y ahí sí, llevarlo a la virtualidad. Recuerde que no solo de redes vive el hombre.